Ceuta entre dos Mares

Ceuta entre dos Mares
Nunca desistas de un sueño. Sólo trata de ver las señales que te lleven a él.Paulo Coelho.

miércoles, 7 de octubre de 2009

Siempre te recordaré



Esta fotografía la hice en Agosto de 2008Clica para verla, es Ceuta.


SIEMPRE TE RECORDARÉ

Me lo dijeron al oído
era noche de tormenta
dejé de oír los latidos,
del corazón que lamenta.
Saber... que cuando vaya
no te encontraré en Ceuta
ni recorriendo los rincones
en los que dejamos huellas.
El Levante me besará
al bajar por mi cuesta
y al subir me empujará
porque volveré sin fuerzas.
En tu jardín desolado
no estará la “nocturna dama”
que perfumaba en verano
tus bellas y dulces palabras.

Y lloraré...
De rabia, de dolor, de pena...
Después me calmaré, resignada
a no verte más por Ceuta.
Te buscaré, en cada ola
que el mar traiga a las playas,
en la sonrisa de un niño,
en la brisa porque abraza.
Mirando al horizonte
abrigaré la esperanza
de encontrarte alguna noche
cuando observo las estrellas
tumbada en mi azotea.
Desde que amanezca el día
soñaré que caminas cerca
que al doblar la esquina
encontraré tu sonrisa,
tu acariciadora mirada
y si he de pasar la vida
soñando, la pasaré sin duda,
con tal de que tu recuerdo
me acompañe mientras viva.


Nine




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No siempre es fácil cerrar capítulos, pero hay que hacerlo y hoy 07 de Octubre cuando se cumple un año que creé este Blog, decido pasar página.
Miles de gracias a todos los que me habéis acompañado en esta experiencia. He aprendido muchas cosas buenas de todos y por eso siempre os recordaré con eterno agradecimiento y cariño.
Gracias de corazón por vuestra impagable compañía.

Un fuerte abrazo a todos y muchos, muchos besos.

Os quiere:
Nine

miércoles, 23 de septiembre de 2009

Otoño entre tú y yo


Te dije que nos volveríamos a encontrar en otoño. No sé por qué hacemos promesas a tantos días vista si después, muchas veces, cuando llega el momento nada es como esperábamos que fuera.

El Otoño llegó como siempre de repente, dejándonos asombrados por lo pronto que se ha ido el verano y que ya "no quedan días del mismo para pedirnos perdón", por los errores cometidos, la desidia o por dejarnos llevar por ese malhumor que a veces nos invade como un enemigo silencioso, al acecho, que espera el mejor momento para ocupar la plaza y desterrarnos de nosotros mismos.

Me digo que no debo preocuparme, que es mi estación favorita, ni Primavera, ni Verano ni Invierno pueden causarme mayor alegría que el Otoño, cuando te recupero de tus largas ausencias, de la falta de ganas de comunicarte pues el calor te hace encerrarte en ti mismo, en tus siestas, tus despistes y el deseo de ver películas y más películas que luego no recuerdas.

En fin, que llegó el Otoño y aunque no todo es como lo planeamos, pisaremos hojas secas del parque, dormiremos bajo dos mantas, nos apetecerá acercarnos porque el frío une y aunque el mayor tiempo te lo pases en tu sillón haciendo lo que te plazca, te sentiré cerca de mi y sabré que cuando te llamo enseguida vienes sin poner condiciones ni pasar facturas.

Nine

jueves, 27 de agosto de 2009

Ahora sí: "Siempre nos quedará París"




Nada más acabar de planificar mi viaje a París se hizo notar, “ella” esa musa que casi siempre me acompaña sentadita en mi hombro. Quería venir conmigo, vivir esa emocionante experiencia y poder hablar después con conocimiento de causa.
-¡Ah, ni hablar!-le dije rotunda.
-¡Nine, Nine!, ¿no te das cuenta que te lo pido por educación? No tengo problema en presentarme allí contigo…pero mejor hacerlo con tu consentimiento.-Susurró en mi oído sin el menor reparo en disimular que es muy parecida a mí en la forma de pensar, ver la vida… (tengo que admitir que ella es más optimista que yo y siempre ve la botella medio llena, la parte buena en los peores momento ,si, me ha enseñado a no sufrir por nimiedades, ser fuerte en las adversidades, le debo mucho).
-Este viaje lo he soñado desde que tenía ocho años y unas encantadoras vecinas me trajeron de París un broche con una Torre Eiffel, que yo me ponía en las blusitas, abrigos, rebecas…por fin lo voy a realizar y no lo quiero compartir con nadie que no sea mi pareja, ¡solos, mi pareja y yo!-le dije con firmeza, aunque comprendía que lo deseara tanto como yo.

Creí que así había quedado claro y no me sorprendería con su presencia, sin embargo cuando iba a la altura de Poitiers, me volví a coger el mapa del asiento de atrás y allí estaba sentada, muy calladita mirándome con ojos de cordero degollado, es tan dulce, sensible (en esto me encantaría parecerme a ella) bastante tímida en el fondo que me dio pena decirle nada aunque solo con la mirada le habría dicho todo. Miré adelante resignada pero dispuesta a ser yo y no dejarme influenciar por sus ideas, a veces imposibles de llevar a cabo, yo sueño con los pies en la tierra, ella no sé hasta dónde es capaz de llegar soñando, imaginando…
Aquella noche salimos a ver París, paseo a lo largo del Sena, nos encontramos con la Torre Eiffel iluminada, aquello era un sueño cumplido, me pellizqué para ver que no estaba soñando, oía gritos de alegría dentro de mí.

Al día siguiente después de madrugar bastante y viajar en Metro, llegamos a los pies de la Torre Eiffel, subimos hasta el segundo piso, las vistas son impresionantes, me comprendéis los que habéis subido y a los que no lo han hecho aún, les animo a que lo intenten. De repente la sentí cerca, me hice la indiferente, no quería percibir ni una sola opinión de “ella”, yo tenía ya mi impresión de esta visita. La envié con el pensamiento al tercer piso, me fui a desayunar a la cafetería y después a la tienda de souvenir.

Sentados en la terraza del “Café du Trocadero” en la Plaza del mismo nombre, volvió a aparecer muy contenta e inspirada.-No sabes lo que te has perdido Nine, hay que subir al tercer piso, es de impacto, ¡cómo se movía !-me susurró mirándome con cara de resignación, conocedora de mi cobardía a las alturas extremas, pero sin conseguir que su comentario me afectara lo más mínimo, yo estaba muy satisfecha con haber visto la Torre in situ y subir al segundo piso era para mí el acabose. Y no me creo que subiera.
Después de comer nos preparamos para visitar en la isla de la Cité, la Catedral de Notre Dame, dejamos el coche en el quartier d`Anjou en la isla de Saint Louis y andando llegamos hasta la hermosa Catedral, esta visita con sorpresa, nos llevó toda la tarde.

Cuando salimos de allí era de noche, con el tiempo justo para cenar en la braserie “L `ombre de Notre Dame”. Esa noche caí en la cama como un saco, no sé qué fue de “ella”, se iría a ver París la Nuit, jajaja, no creo, estaría tan cansada como yo, después de subir los 460 escalones hasta las torres de la Catedral, admirar la hermosa campana de la torre Sur.

Al día siguiente visitamos el Louvre, era otro de mis objetivos ver a la Gioconda, enseguida empezó a convencerme de que tenía que ver muchas más obras que era insólito ir al museo y no ver a la Venus de Milo. Tuve que darle la razón. Teníamos que intentar ver algunas de las 300 obras que no te puedes perder del Museo del Louvre.
De pronto oí:
-¡No podemos irnos de aquí sin ver la Venus de Milo! Esta vez no fue “ella”.

Imposible ver el Louvre en las ocho horas que pasamos allí, pero conseguimos visitar muchas salas. Desayunar en la cafetería al aire libre en una amplia terraza dónde nos hicimos unas fotos con la pirámide de fondo. Comimos en la cafetería debajo de la pirámide. Todo precioso.

Como broche final a este día, hicimos compras en las elegantes tiendas que están debajo del Jardín de las Tullerías, paseamos por ellos, ver el Arco de Carrusel.

Los siguientes días de estancia en París los dedicamos a conocer los lugares más emblemáticos de la ciudad, Monmartre, la Torre Montparnasse, Los campos Elíseos, el Arco del Triunfo, Barrio Latino, el Sacre Coeur, la Plaza de la Concordia, Galerías Lafayette…etc. La musa lo pasó de lo lindo, se portó bien pues me dejó ser yo misma, tener conversaciones con mi pareja sin influir en nada…

Volvimos convencido de que “París bien vale una misa…”

…Y de que volveré lo antes que pueda. Con musas o sin ellas.

Nine






viernes, 17 de julio de 2009

Vacaciones





Las vacaciones de verano llegaron, me subo a ellas y me marcho al Mar tan soñado.

Quiero agradeceros a todos los que me habéis visitado vuestra compañía, afecto y respeto y que os llevo en el corazón.

Muchos besos y abrazos.

¡Hasta pronto!

¡¡Feliz Verano !!

Con mucho cariño:

Nine



miércoles, 15 de julio de 2009

Nunca te alejes de mi...



Repetí tu nombre como una oración,
un día tras otro en aquella soledad
que asoló la casa,
sombría, inhabitable sin remisión.

De la mañana a la noche aquella letanía,
decir tu nombre sin compasión
ni consuelo para mi corazón
cuando al salir de mis labios los hería.

Menuda, como un gorrión, tan solitaria…,
con aquel aire triste que me acompañaba,
a dónde quiera que fuera, de niña olvidada,
que no sabe cuánto es protegida y amada.

Una mañana de verano a mí volviste,
para no separarte nunca de mi lado,
cumpliendo todo lo que prometiste,
sueños al alcance de mis manos.


Nine

miércoles, 24 de junio de 2009

Y...



Y…Yo caminé despacio entre la gente
con esa sensación de derrotaque algunos conocen…
La vida escapando de las manos
dejando un vacío insoportable
un sabor amargo en la boca
aparcadas las ilusiones,
los sueños lejanosdesvaneciéndose en la tarde,
con la mirada fija en la vieja fotografía
que encontré en el cajón olvidado
llena de grietas y manchas amarillascómo aquel amor,
hacía tiempo  acabado
que nunca volvería a la vida.


Y…
Tu caminaste solitario entre la gente
esperando encontrar mi abrazo enamorado.
Se hizo muy tarde, pasó aquel presente,
algunos sueños tienen fecha de caducidad
aquellos míos hacía tiempo habían caducado.
Para fabricar nuevos sueños no tenía material.





Nine



jueves, 28 de mayo de 2009

Mi ocaso



La tarde lenta camina
al encuentro de la noche
el Sol oculta su derroche…
ocaso tras el horizonte.
Pronto ha salido la Luna
reflejada en la Rivera
es como una joven coqueta
que de mar se perfuma.
Sentada en la arena lloro
la muerte de mi esperanza,
nunca volverás mi niño
te he perdido para siempre
perdí todo lo que fuimos,
la culpa es mía, cariño,
no he sabido quererte
todo lo que nos prometimos.

Mi ocaso llega con la noche…
cuando comprendo mi error,
faltó adorarte mi amor
¡Tanto como tú mereces!

Nine