Se fue el Sol, el resplandor
que había en el cielo se fue apagando
dejando nuestros cuerpos a oscuras,
sentí un escalofrío recorrerlo todo…
De repente me envolviste
en tus amorosos brazos, mientras
tus labios apasionados me besaban en silencio.
El mar era un espejo y la ligera brisa vespertina
nos trasladó a paisajes conocidos,
recordados con nostalgia,
llenando nuestras almas de añoranzas
y también de esperanzas nuevas.
Quiero estar siempre así a tu lado
sentirme querida y deseada
sin llorar de noche en soledad
sin poder soportar tu ausencia
encontrar cada mañana al despertar
la rosa que me prometiste.
¡Amor, amor mío, no es tarde!
Aún es tiempo para nosotros,
para crear nuevos lazos que nos unan
sentir en nuestros corazones la ternura
volver a tener felicidad, ilusión.
Vivir unidos lo que nos quede de vida
bajo el cielo protector de nuestro amor.
Aún es tiempo para nosotros,
para crear nuevos lazos que nos unan
sentir en nuestros corazones la ternura
volver a tener felicidad, ilusión.
Vivir unidos lo que nos quede de vida
bajo el cielo protector de nuestro amor.
Nine
6 comentarios:
Muy precioso. al final de la lectura. nació un suspiro por tus versos..
bravo..
muy sentidos
saludos fraternos
con mucho cariño
un abrazo muy grande
besos
Muy bellos, tus letras son maravillosas.
Está lleno de dulzura tu escrito, Nine. Siempre se está a tiempo de hacer las modificaciones necesarias para que el amor brille con todo su esplendor.
Un beso muy grande, amiga mía.
Agradezco tus palabras Adolfo.
Un abrazo fraternal con mucho cariño.
Besos.
Muchas gracias Carla me alegra que te gusten.
Besos.
Gracias Malena. Todo lo hecho por amor merece la pena. Y que no se nos haga tarde, al amor hay que cuidarlo.
Muchos besos.
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